La Basílica fue construida entre 1232 y 1307 por la Orden Franciscana, que deseaba destinarla a albergue de la tumba de San Antonio. La fachada, en la que se destacan las imponentes arcadas góticas, es aligerada por la presencia de una graciosa arcada.
Las ocho cúpulas y las dos torres que la coronan dan al conjunto un aire marcadamente oriental. El interno de tres naves con matroneos encierra valiosas obras de arte, tales como la tumba del Gattamelata, de B. Belino (siglo XV), los frescos de Laticífero y Avanzo (1377) y bronces de Donatello.
Monumento ecuestre al Gattamelata
Frente a la basílica del Santo se alza esta estupenda obra de Donatello, quien la realizo en 1453. El Gattamelata, Erasmo de Narni (1370-1443) era un heroico capitán (« condotiero ») de la Republica de Venecia que murió en Padua.
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